Claves para ser productivo cuando trabajas en la casa
¿Te gustaría trabajar sentado en las ruinas de Machu Picchu? ¿Y en un lugar con una bella vista en la ciudad argentina de Bariloche? Uno de cada cuatro latinoamericanos respondió afirmativamente la primera pregunta, mientras que uno de cinco lo hizo ante la segunda interrogante. La tradicional oficina ya no es atractiva para los empleados actuales, quienes aseguran que consideran esos espacios como «poco inspiradores para trabajar», segúnun reciente estudio publicado por el News Center de Microsoft Latinoamérica.
La gran duda que surge es que si al trabajar efectivamente en los lugares de ensueño mencionados, o desde la comodidad de la casa, o de un café con red inalámbrica, el trabajador va a producir lo mismo que si estuviera sentado frente a un computador en uno de los cubículos típicos de oficina. La respuesta es simple: el 46% de las personas son más productivas cuando trabaja fuera de la oficina.
«Se encuentran datos empíricos que destacan aumentos de productividad de las personas que trabajan desde su casa versus las que permanecen en la empresa y, por lo tanto, se puede producir lo mismo e incluso más. Hay que tomar en cuenta también que trabajar lejos de la oficina presenta desafíos como la autodisciplina, cumplir metas y, por supuesto, presenta desventajas como la falta de contacto humano entre pares y superiores, una mayor propensión a la soledad y el poco reconocimiento laboral al desaparecer del radar del jefe», apunta el docente de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad del Pacífico, Luis Yáñez.
El especialista en Gestión Organizacional explica que durante el siglo XX se buscó incesantemente la fórmula para mejorar la productividad de las organizaciones, enfocándose en los insumos producidos en un periodo específico y en la calidad de éstos. Pero, luego se comenzó a tomar en cuenta a los trabajadores.
«Posteriormente, cobran relevancia aspectos intangibles, presentes en las organizaciones, tales como el clima organizacional, la motivación y la pertenencia a un grupo. En este contexto, la teoría de motivación de Herzberg señala que ciertos aspectos, como las condiciones de trabajo, entre otras, son un factor de higiene o de mantenimiento y por lo tanto no motiva al trabajador, pero debe estar presente ya que de lo contrario provocaría su desmotivación. De hecho, la ausencia de los factores de mantenimiento en la organización puede incidir en el ausentismo y la rotación, provocando un impacto negativo en la productividad», explica Yáñez, ingeniero civil industrial.
«Además, se consideran condiciones del lugar de trabajo a factores que van desde el tipo de construcción, los servicios higiénicos presentes, orden y limpieza, señalización, espacios de trabajo, separación entre elementos, vías de evacuación, dimensiones, layout de las maquinarias, flujogramas de trabajo, etc.», describe el experto de la U. del Pacífico.
Los tres consejos fundamentales
Según un estudio de Fortune, el 82% de las cien mejores compañías para trabajar, brindan a sus empleados la oportunidad de ejercer lejos de las instalaciones de la empresa. Asimismo, la investigación concluyó que el 77% de los trabajadores son más productivos fuera de la oficina que dentro de ella.
«No todos los trabajos, dada su naturaleza, pueden ser ejecutados desde el hogar y, en consecuencia, no todas las personas pueden optar a este tipo de organización para su trabajo. Por ejemplo, un operario de maquinaria debe estar físicamente presente para iniciar la puesta a punto de la máquina, verificar condiciones o corregir errores. El estadounidense Stephen Robbins hace referencia a tres categorías que son apropiadas: tareas rutinarias de manejo de información, actividades móviles y labores profesionales relacionadas con el conocimiento. Por lo tanto, la persona puede producir desde su casa siempre que la naturaleza de su trabajo se lo permita y además que lo desee», advierte Yáñez.
Para algunos, trabajar lejos de la mirada de un superior puede conducirlos a ser menos productivos. Por eso, la clave está en tener las metas claras. «El trabajo debe tener esa connotación, independiente del lugar donde se realice. Por lo tanto, mientras se trabaja se está ejerciendo un rol determinado, lo que significa que se debe prestar atención y concentración a la tarea realizada, lo que a su vez requiere de determinadas condiciones», apunta el experto.
Así, el docente de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad del Pacífico, Luis Yáñez, indica tres condiciones que debes tener o hacer para trabajar desde la casa y producir lo mismo o más que cuando estás en la oficina. Toma nota:
1. Ubícate en un lugar especial, privado y libre de distracciones: No hay que mezclar el ambiente familiar con el laboral, por lo que, por ejemplo, no es adecuado trabajar en la mesa del living o almorzar en el lugar que tengo destinado para trabajar.
2. Establece rutinas de tiempo que permitan generar eficiencia, pero también descanso: Se debe comenzar en la mañana, de la misma forma que un trabajo presencial en la oficina. El trabajador en la casa debe primero darse una ducha, vestirse (no es recomendable trabajar en pijama), tomar desayuno y luego comenzar a trabajar.
3. Comunica a la familia que estás trabajando, que debes cumplir horario y que respeten tus tiempos: Esto permitirá beneficios tales como ahorro en transporte y tiempo de viajes, menor probabilidad de accidentes y conciliar familia y trabajo…