¿Qué beneficios económicos deja el Mundial de Fútbol?
El Mundial de Fútbol que se está celebrando actualmente en Rusia, es uno de los eventos deportivos más importantes del mundo, seguido por la mitad de los habitantes del planeta. Esa gran popularidad, se traduce en grandes cantidades monetarias que se mueven.
Muchos países se interesan en optar a ser el país anfitrión del Mundial del Fútbol, la proyección es más que evidente. Sin embargo, ¿Es realmente rentable el Mundial de Fútbol para el país anfitrión? ¿Qué beneficios económicos deja el Mundial de Fútbol?
Beneficios para el país anfitrión: El caso de Rusia
Los preparativos de Rusia para el Mundial han sido 867.000 millones de rublos (11.800 millones de euros), que supone alrededor del 1% del total de las inversiones efectuadas por el país en los últimos cinco años. Por lo tanto, esta inversión pública debería ser recuperada con la recaudación impositiva del evento y las futuras utilidades de las infraestructuras de transporte y la construcción de los estadios para los rusos.
Si tenemos en cuenta las inversiones realizadas y los ingresos que se derivan de ellas, derivados del flujo de los 570.000 aficionados estimados que visitarán el país, es difícil que puedan obtener una rentabilidad positiva. Rusia ha admitido que no obtendrá beneficios como anfitriona, pero considera la extravagancia futbolística internacional como una oportunidad para hacer una inversión a largo plazo en un deporte que ha sufrido desde la época soviética.
También quiere evitar quedarse atascado con llamados «elefantes blancos», estadios construidos para grandes eventos que se convierten en símbolos abandonados de mala gestión y exceso. Este problema ha atraído la atención recientemente después del Mundial de 2014 y los Juegos Olímpicos de Verano de 2016 en Brasil.
Para evitar el caso de Brasil, desde Rusia han planeado más gasto en infraestructura que podría añadir entre 150.000 y 210.000 millones de rublos al PIB ruso cada año durante los próximos cinco años. La gran pregunta es si detrás de este gasto público existirá una verdadera utilidad para los rusos o se seguirá cebando la bomba de las infraestructuras sin resultado -el tiempo dirá-.
Si nos centramos en la cifras macro, no se espera un especial impacto en la economía rusa. Según el Banco de Rusia, el crecimiento del PIB de Rusia en el segundo trimestre se puede incrementar en 0,1 y 0,2 puntos porcentuales gracias al Mundial. Tampoco se espera que exista tensiones inflacionistas en el país, pues, a pesar de la avalancha de turistas, es un efecto de corto plazo que sólo impacta en ciertas ciudades y ciertos sectores -Alimentación, hotelería, telecomunicaciones y transporte-.
Este impacto muy limitado a nivel nacional se debe a la duración limitada del Mundial -del 14 de junio al 15 de julio- y el gran tamaño de la economía rusa -11 ciudades en las que se disputa el torneo-…