¿Latinoamérica ya tocó fondo? Estas son las perspectivas de sus economías
Las economías de Latinoamérica habrían tocado fondo, en efecto como lo mencionan la mayoría de los discursos oficiales de los distintos países, sin que ello signifique una pronta recuperación.
Ver la “luz al final del túnel” sería solamente el primer paso hacia una larguísima recuperación, ya que la región será la que más podría tardar en ubicarse en los niveles pre-Covid porque en la mayoría de las economías o no se implementaron estímulos fiscales/apoyos económicos, o estos han sido insuficientes para la magnitud de la crisis que se enfrenta.
Igualmente, el destello de una luz al final del túnel no impedirá que los principales indicadores económicos vuelvan a deteriorarse o lo hagan más todavía, en caso de que eventuales rebrotes o condiciones externas no favorezcan el crecimiento, que se espera algún día regrese a la zona.
En su reporte económico global, Barclays Bank analiza los puntos de recuperación que observan en las principales economías de la región, o bien los factores que podrían impulsar la salida de la crisis, reproducimos enseguida algunos de los más relevantes, elaborados por una institución que ve desde fuera el desempeño de las economías de esta parte del planeta.
Brasil
Los datos más recientes indican que probablemente la mayor contracción económica del gigante sudamericano se registró en abril pasado; para mayo las ventas minoristas sorprendieron con un incremento de 13.9 por ciento, otros indicadores de ventas fueron igualmente positivos. El considerable programa de transferencia de efectivo de reales a trabajadores informales, conocido como “coronavoucher” probablemente amortiguará una parte importante de los ingresos perdidos durante la pandemia y será un pilar para la economía, aunque sea temporalmente.
También en mayo, la producción industrial creció 7 por ciento. Sin embargo, sigue cayendo 21.9 por ciento en términos interanuales. Los indicadores de confianza mostraron ganancias en todos los ámbitos en mayo y junio; aunque la incertidumbre sigue siendo alta en el comienzo del tercer trimestre en medio de la posibilidad de que se impongan nuevas cuarentenas regionales las tasas de contaminación permanecen obstinadamente altas. El pronóstico del PIB para Brasil es -5.7 por ciento para 2020.
Argentina
En este país, los indicadores sugieren que una recuperación parcial inició en mayo, como resultado de cierta relajación de las medidas de confinamiento. El sector manufacturero tuvo un fuerte repunte, hasta 9.0%, aunque permanece en niveles muy deprimidos de -26.4 por ciento en términos anuales. Los sectores con peor desempeño son automotrices con -45 por ciento, textiles -4 por ciento, equipos e instrumentos -38 por ciento, así como minerales y metales con -35 por ciento a tasas anualizadas. La construcción imprimió una fuerte recuperación en mayo después de una fuerte caída en abril. No obstante, el sector está un 34 por ciento por debajo del nivel de febrero. Creemos que parte de la recuperación de mayo y probablemente a principios de junio pudo aminorarse debido a que se fortalecieron las medidas de bloqueo contra el virus en el Gran área de Buenos Aires. Barclays espera que la recuperación se reanude a fines de julio y más fuertemente en agosto, suponiendo que las restricciones a la actividad económica se levanten gradualmente.
Chile
El sector minero tuvo un mejor desempeño, compensando en parte el impacto en la demanda interna; el componente minero disminuyó sólo 0.6% mientras que el resto de la economía se contrajo 3.7% por ciento mensual. En junio, la actividad económica probablemente será relativamente plana frente a mayo, ya que los bloqueos se mantuvieron. El banco inglés ve riesgos a la baja para la recuperación si la producción minera, que ha sido bastante resistente hasta ahora, se ve más afectada por la pandemia. Recientemente revisó a la baja su previsión del PIB para 2020 a -6.5 por ciento desde -4.9 por ciento, como resultado de la extensión del bloqueo contra el virus.
Colombia
En Colombia, se ven los primeros signos de lo que podría ser una recuperación rápida y fuerte. La confianza del consumidor aumentó 16.3 por ciento en mayo, aunque se mantuvo en territorio negativo a tasa anual con -9.2 por ciento; esta implica una recuperación de casi un tercio de las pérdidas en los dos meses anteriores.
La próxima semana se publicarán cifras de producción para mayo; aunque se espera que reflejen contracciones agudas de -13.1 por ciento mensual y -8.6 por ciento anual, esto implicaría un rebote de más del 45 por ciento y 75% en relación con los mínimos de abril.
“Creemos que una recuperación sostenida no sólo contendría el daño a las finanzas públicas, también crea un entorno que favorece una reforma fiscal para 2021”, dice Barclays.
Perú
En Perú también hay signos de mejora, pero desde una posición mucho peor. La falta de selectividad en la implementación de medidas de distanciamiento social ha provocado una mayor contracción de la economía. “Esperamos que la economía haya caído 30.1 por ciento en mayo; el agregado, lo que llevaría a una contracción de dos dígitos este año, a pesar de una posible recuperación para el segundo semestre del año”.
México
En México, la economía se está recuperando, aunque gradualmente. El área de análisis del banco calcula que el shock de abril fue equivalente a una pérdida del 18.7% del PIB con respecto al valor del PIB de 2019. Este choque se concentró en seis sectores: construcción -2.8 por ciento, manufactura -5.8 por ciento, ventas mayoristas y minoristas -4.1 por ciento, servicios de transporte -1.7% por ciento, alimentación y alojamiento -1.3 por ciento y servicios deportivos y de entretenimiento con -0,6 por ciento. Todos ellos están relacionados con medidas de cierre, distanciamiento social y cierre de operaciones, representan el 53 por ciento de la economía mexicana, pero contenían el 90 por ciento del shock.
“A medida que la economía vuelve a la ‘nueva normalidad’, creemos que estas actividades recuperarán sus pérdidas. En nuestra opinión, la construcción, la fabricación y las ventas podrían recuperarse relativamente rápido, ya que estas actividades deben cumplir con ciertas medidas sanitarias”, comentó el área de análisis.
En contraste, Barclays espera un retorno más lento en transporte, comida y alojamiento y entretenimiento, donde las medidas para controlar el virus podrían ser más difíciles de implementar y depender de cuán seguras las personas creen que serían estas actividades. Eso significa que al menos el 89 por ciento de la economía podría volver a los niveles normales durante el segundo semestre del año. En mayo se observaron tendencias mixtas en la fabricación y producción de equipos de transporte mientras que los metales, el plástico y la madera disminuyeron aún más.