La escasez del recurso gerencial
Existe en la actualidad una escasez gerencial patente en muchas organizaciones y empresas españolas. Esta escasez se refiere a la falta de liderazgo a la hora de desarrollar a las personas.
Oímos por todos los lados la necesidad de buenos profesionales para que las organizaciones aporten un servicio de calidad a la sociedad. Necesitamos de médicos profesionales, arquitectos profesionales, ingenieros profesionales, técnicos profesionales, profesores profesionales, etc.
Resulta reiterativo, lo sabemos, profesional profesional, pero a la vista de malos trabajos conocidos por todos no resulta más que un adjetivo necesario.
Cada una de las profesiones mencionadas anteriormente supone un conocimiento muy específico, junto con la habilidad necesaria para implementarlo, y que nosotros colocamos en el terreno del conocimiento también.
Sin embargo qué pocas veces se oye hablar del directivo profesional, no por los conocimientos concretos que demande su profesión, sino por la labor directiva que desempeña, por la labor de dirigir personas. En último término no se dirigen oficinas, ni fábricas, ni tiendas, ni tecnologías, se dirigen personas. Y eso exige una responsabilidad profesional muy especial.
De todos los recursos que una empresa u organización tiene para desempeñar su labor y prestar su servicio a la sociedad en la que se desarrolla, el gerencial es el más escaso. Recursos humanos no faltan. Es cierto que muchas veces andamos apurados en busca de la profesionalidad técnica necesaria, pero siempre hay gente dispuesta a dejarse la piel en un trabajo y a hacerlo bien.
El recurso tecnológico tampoco resulta un problema especial. Hoy día a base de euros o dólares se consiguen las tecnologías necesarias. Antes era privilegio de unas pocas sociedades, hoy en día está al alcance de casi todas.
Por tanto en las empresas y organizaciones no falta el recurso humano ni el material, los conocimientos los tenemos, y también el desarrollarlos, sin embargo, de las personas con responsabilidades sobre otras personas, los directivos ¿cómo desarrollan su liderazgo?
Éste es el punto al que queremos ir cuando indicamos que el recurso gerencial es el más escaso en las organizaciones y empresas españolas.
Después de un estudio de dos años, observando los comportamientos, realizando cuestionarios y hablando personalmente con más de 1.200 directivos españoles de sectores tan diversos como el automovilístico, logístico, de distribución, de seguros, ingenierías, del transporte e incluso en centro universitarios donde se imparten master en dirección de empresas hemos llegado a las siguientes conclusiones sobre lo que caracteriza al directivo español y en qué debería mejorar.
El directivo español por su actuación es honrado y demuestra un nivel alto de ética profesional. Está muy comprometido con la empresa en la que trabaja, dejando en ella muchas horas de dedicación incluso los fines de semana. Conoce muy bien la meta y los objetivos, teniendo en la cabeza el camino estratégico clave para alcanzarlos. En eso siempre hemos sido sorprendidos, pues demuestran una gran capacidad analítica de la situación, además de visionar el futuro de alguna manera.
Apoyan mucho la iniciativa de sus colaboradores, la creatividad y la innovación en el trabajo, de manera que cuestionan continuamente el cómo se están haciendo las cosas y cómo se podrían hacer mejor.
Visto lo mejor del directivo español, entremos en lo mejorable. En primer lugar surge la capacidad para delegar. Por miedo o prepotencia se delega poco y de mala manera. Se suele utilizar un mismo tipo de liderazgo para todas las situaciones, siendo éstas, a veces tan distintas (como lo somos las personas). El tiempo que dedican a sus colaboradores es escaso y el conocimiento de ellos resulta del mismo nivel. Desarrollan poco, no actúan como coaches de sus colaboradores.
Además, precisamente por su cualidad de ser muy entregados en su trabajo, existe un desequilibrio grave entre lo personal y lo laboral.
Como podemos ver en estas breves pinceladas que necesitarían más que un capítulo para cada ítem, las deficiencias se localizan en los hábitos del liderazgo a la hora de dirigir personas, sin embargo las fortalezas están en la capacidad de trabajo y en los conocimientos.
Si al final sólo se dirigen personas, debemos concluir que el recurso gerencial, que es el que desarrolla a las personas resulta escaso en nuestros directivos. Norma general que tendrá grandes excepciones y que alguna de ellas conocerá el lector, pero que identificará como cierta la escasez gerencial en los demás casos.
Sin duda el tema del liderazgo es un factor sumamente importante dentro del contexto laboral vigente y en el de la vida misma, sin embargo, muchas empresas están siendo presas de la propia voragine en que este mundo actual te obliga a manejarte. Es cierto y coincido plenamente con el autor de la nota, en que
hoy en día es muy fácil conseguir altos estándares técnicos para cualquier organización, pero es muy diferente a la hora de conseguir un verdadero recurso gerencial pues la condición de líder no es inherente a un profesional graduado o a un técnico calificado. Ser líder es mucho más complejo que eso y por lo tanto escaso.
Completamente de acuerdo, sobre todo cuando una empresa como la mia, que le da la oportunidad a ingenieros recien egresados, a los cuales no solo se necesita liderazgo, sino directriz, tanto laboral como personal, espero que se comente mas del tema, ya que la idea no solo es reconocer el deficit gerencial sino como combatirlo.
Claro, concreto y de aplicación ágil las recomendaciones. Valioso aporte que amplia y/o fortalece nuestros conocimientos y puesta en práctica.
Los gerentes no nacen, se forjan de la experiencia y la adversidad, de alli se crea el criterio. Los gerentes tienen la obligacion de motivar e impulsar a sus colaboradores. No existe la escasez gerencial, falta liderazgo. mi mi comentario sobre el articulo es que este lo escribio un gerente, mas no un lider.