Las 7 “habilidades” que NUNCA debes poner en tu currículum vitae
Al escribir un currículum vitae, muchas personas lo arman con la filosofía del “espagueti en la pared”: lanzan todo lo que puedan y esperan que algo se quede pegado. Pero los reclutadores y los gerentes de contratación en realidad buscan información de calidad, no cantidad. Después de todo, sólo cuentas con 7 segundos para capturar la atención de un reclutador, por lo que debes asegurarte en comunicarle rápidamente las cosas positivas. Es por eso que conviene recortar la información que presentamos en nuestros CV.
Tomemos por ejemplo el portafolio de un artista.
“Cualquier profesional serio te dirá que tu portafolio sólo es tan fuerte como tu pieza más débil. Lo mismo se puede decir de las habilidades que enlistas en tu CV: menos es más”, dice Aurora Meneghello, coach de carrera y fundadora de Repurpose Your Purpose.
¿Estás tratando de mejorar tu CV? Empieza por quitar estas actividades que no resultan atractivas para los reclutadores.
1. Un idioma que sólo estudiaste en la preparatoria
Claro, tomaste francés en la preparatoria por algunos meses, pero ¿estás realmente en un nivel donde te sientas cómodo sosteniendo conversaciones cotidianas con hablantes nativos o leyendo en ese idioma? Si la respuesta es “no”, entonces no debes ponerlo en tu currículum.
“No importa si tienes un entendimiento básico o intermedio de un idioma. A menos que lo domines y puedas realmente utilizarlo para el trabajo, déjalo fuera “, sugiere Meneghello.
En el peor de los casos, el reclutador podría hablar el mismo idioma y tratar de iniciar una conversación. Si descubre que estás mintiendo sobre esa habilidad, puedes apostar que no serás invitado a seguir adelante en el proceso de contratación.
2. Habilidades básicas de computación como correo electrónico y Microsoft Word
En este punto de la historia, saber usar el correo electrónico o Microsoft Word es casi equivalente a saber leer o manejar matemáticas básicas. Es decir, no son diferenciadores, sino que se espera que sepas usar estas herramientas.
“Al agregar estas ‘habilidades’, puede parecer que los candidatos están tratando de ‘inflar’ su currículum. Es decir, que están poniendo cualquier cosa en su CV porque no tienen suficientes habilidades relevantes “, dice Peter Riccio, socio fundador de la empresa de reclutamiento Atlas Search.
Una excepción a esto sería si has perfeccionado una práctica muy específica utilizando estos programas, como “[crear] una base de datos de acceso desde cero e importar datos de Excel para hacer análisis de Big Data”, dice el coach de carrera Mary Warriner.
3. Uso de redes sociales (fuera del trabajo)
Puede que tengas miles de seguidores en Twitter, millones de amigos en Facebook y un sinnúmero de likes en Instagram, pero la gestión de su marca personal y la gestión de la marca profesional de una empresa son dos cosas completamente diferentes. Trabajar en medios sociales en un entorno profesional a menudo requiere mucho más que simplemente publicar contenido atractivo – a menudo implica análisis de datos, experiencia con medios de pago y más.
“Puedes ser muy bueno para en publicar fotos de tus amigos e incluso para compartir noticias sobre tu empresa actual, pero si no estás solicitando un puesto de estratega de redes sociales, no debes presumir lo que sabes hacer en Facebook” dice Warriner. “Mejor revisa la oferta de trabajo para ver las habilidades requeridas y asegúrate de enumerar las habilidades significativas que posees”.
4. Las llamadas “soft skills”
Estas habilidades son un poco difíciles de manejar porque a los reclutadores no les encanta verlas en los CV. Sin embargo, debes demostrarlas con hechos. Por ejemplo, decir que eres un buen comunicador no significa nada si no lo puedes probar con ejemplos concretos.
“El error más común entre los solicitantes de empleo es hacer una lista de habilidades soft en su CV. Por ejemplo, dicen que son buenos comunicadores, saben hacer varias tareas a la vez, tienen liderazgo, son buenos con la resolución de problemas, etc. El mensaje que mandas al poner estas cosas en tu currículum es ‘No sé cuáles sean mis mejores habilidades, por eso te las pongo todas para que las veas’”, dice Riccio.
En lugar de enlistar tus soft skills, mejor demuéstralas.
“Comunica tus habilidades en el cuerpo de tu CV. Por ejemplo, en lugar de poner que tienes ‘liderazgo’, escribe que has conducido múltiples proyectos simultáneos con resultados positivos”, aconseja Riccio.
5. Exageraciones o mentiras
Los solicitantes de un empleo a menudo suelen incluir palabras que ven en las solicitudes de empleo para adornar sus CV. Pero si no tienes las habilidades solicitadas en la oferta de trabajo, no las incluyas en tu currículum. Puedes pensar que te vas a salir con la tuya, pero a verdad eventualmente saldrá a la luz.
“Si no eres un excelente comunicador oral, no lo pongas en tu CV. Si el trabajo requiere que te levantes a hablar enfrente de un grupo de personas todos los días, probamente serías miserable si mientes”, dice Warriner.
Eso no significa que debas tener TODAS las habilidades listadas en la oferta de trabajo. Una buena regla general es que puedes tener entre el 80 a 90% de las características requeridas para llamar la atención de los reclutadores.
6. Tecnología anticuada
El software y la tecnología que se utilizan en el lugar de trabajo pueden cambiar rápidamente, por eso es importante estar al día en su uso. De lo contrario, corres el riesgo de parecer que no puedes mantenerte en un lugar de trabajo dinámico.
“Las empresas buscan profesionales sofisticados y flexibles que comprendan la tecnología. Al incluir tu uso de tecnología obsoleta en la sección de habilidades de tu currículum, le das la impresión a los empleadores que tus conocimientos están rancios y que tardarás mucho en aprender habilidades nuevas”, dice Riccio. “En un mercado tan competitivo como el actual, los empleadores quieren invertir en personas que han demostrado tener la capacidad de aprender rápidamente”.
Así que deja fuera las cosas como los lenguajes de codificación que ya no están ampliamente en uso, las versiones obsoletas de los programas de software modernos y otras tecnologías irrelevantes.
7. Información irrelevante y habilidades de broma
Esto puede sonar obvio, pero realmente hay personas que aún ponen cosas en su CV como “cocinero experto de guacamole” o “campeón de ping-pong certificado”.
“No incluyas habilidades que sean irrelevantes para el trabajo que solicitas. Estoy increíblemente orgulloso de haber hecho las mejores galletas de un concurso de mi colonia, pero trabajo en recursos humanos. ¡No pongo eso en mi currículum! “, dice Warriner.
Seguro, hay probablemente algunos reclutadores que encontrarán esos detalles graciosos o encantadores. Pero cuando aplicas para un trabajo, no sabes quién apreciará ese chiste y quién no, así que es mejor decantar al lado del profesionalismo.