¿Podrá el nuevo gobierno reactivar la economía de Argentina?
Con la creciente influencia de Alberto Fernández en el escenario político desde que fue nombrado como candidato a presidente por parte de Cristina de Kirchner, se viene escuchando repetidamente la estrategia económica que él y sus funcionarios seguirán para resolver los problemas de la economía argentina. Como el consumo es el 70% del PBI, la clave pasa por reactivarlo, lo que requiere recomposiciones salariales, menores tasas de interés y el fin de la austeridad fiscal. Esto va a conducir a un aumento del PBI, que dinamizará la inversión y mejorará la situación fiscal, entre otra serie de efectos positivos. Si esto es así, ¿por qué no lo intentó el gobierno anterior? ¿No le hubiera convenido, ya que le hubiera ido mejor en las elecciones? Veamos.
El análisis de este tema se inscribe de modo más general en una discusión que forma parte central de la teoría económica: ¿qué efectos provoca un aumento de la demanda en una economía? ¿Más crecimiento, es decir, un mayor PBI real o producción? ¿Más inflación? ¿O ambos? Como muchas cuestiones en economía, la respuesta es que depende. Parece poco como respuesta, pero no lo es: implica que no necesariamente un aumento del consumo, que es un componente de la demanda de la economía, lleva a más crecimiento.
A partir de esto, la siguiente pregunta relevante sería: ¿en qué condiciones sí lo haría? La respuesta más extrema sería en un contexto de cero inflación, o sea, de precios rígidos; una más moderada sería en un contexto en que la inflación tienda a mantenerse estable. Esta última apreciación permite entender por qué el gobierno previo no intentó (al menos en forma drástica) incentivar el consumo del modo que lo propone el nuevo gobierno: en el contexto del último año y medio, bajar las tasas de interés y propiciar aumentos salariales no hubiera hecho más que azuzar la inflación. ¿Por qué? Porque en este contexto, las empresas tienden a enfrentar la mayor demanda aumentando sus precios más que las cantidades vendidas y a pasar a precios sus aumentos de costos, como lo implican los mayores salarios o el mayor tipo de cambio derivado de políticas como las señaladas…