Estudio español revela quiénes son los más perjudicados a la hora de optar a empleos
Las empresas establecen en las ofertas de empleo que publican una serie de requisitos previos que todo candidato debe cumplir para poder acceder a esa vacante ofertada. Estos criterios les sirven de ayuda para acotar la búsqueda de los perfiles que mejor se adaptan a sus necesidades. Dos de los requisitos que más se repiten son la edad del candidato y sus años de experiencia en el sector o en puestos similares al ofertado.
A la hora de realizar un proceso de selección, las empresas valoran de forma muy positiva que los candidatos cuenten con conocimientos previos sobre el puesto, pero también hay otras competencias y habilidades que les sirven para reconocer factores de tipo cualitativo con los que realizar una mejor evaluación de los conocimientos y capacidades del candidato.
El problema surge cuando hay que acreditar y certificar esas cualidades que son menos visibles. Aspectos cuantificables como la edad o la experiencia laboral del demandante de empleo cobran un mayor protagonismo y se convierten en unos de los sistemas más recurrentes para evaluar los distintos perfiles profesionales.
Estableciendo márgenes de edad y experiencia, las empresas consideran que pueden afinar más la búsqueda del candidato perfecto para el puesto que quieren cubrir.
Así, demostrar cierta experiencia en el sector es un requisito indispensable en más de 3 de cada 4 ofertas analizadas y el requerimiento de edad es sugerido en casi 1 de cada 3.
Las ofertas son para candidatos de entre 26 y 35 años
De las más de 720.000 ofertas de empleo analizadas por Adecco e Infoempleo para este estudio, en el 31,2% de ellas se recomienda entre los requisitos la edad de la persona a incorporar. Si bien es cierto que para las empresas no se trata de un factor determinante para la contratación del profesional, sí lo es para descartarle, independientemente de sus otras cualidades, aptitudes y actitudes.
La edad media requerida para cubrir la oferta de empleo ha descendido ligeramente durante este último año, quedando ahora en los 34 años (un año atrás se aproximaba más a los 35).
Por segmentos de edad, y de forma general, se acentúa la tendencia que se ha registrado en los últimos años. La franja de edad que tiene más fácil el acceso al mercado laboral es la que abarca desde los 31 a los 35 años, con el 28% de las vacantes de empleo, seguida de la que va de los 26 a los 30 años, con un 25,1%; en total más del 55% de las ofertas de empleo. Mientras que el segmento de 36 a 45 años desciende su participación hasta el 29%.
Los peor parados son los profesionales con más experiencia en el mercado laboral, es decir, los mayores de 45 años. Las ofertas que valoran candidatos que estén dentro de sus últimos 20 años de vida laboral siguen cayendo y se quedan tan sólo en el 6,2% (6,6% hace un año). La dificultad de acceso al mercado de trabajo para los profesionales de más de 45 años tiene su reflejo real en las elevadas tasas de desempleo existentes entre los candidatos de esta franja de edad.
Otro de los colectivos que más sufre las consecuencias de la edad en las ofertas de empleo son los menores de 25 años. Ãâ°stos pueden optar al 8,9% del total de las ofertas, y aunque estadísticamente no son buenos datos, desde un punto de vista competencial un porcentaje alto de esos candidatos en búsqueda de empleo opta por seguir formándose, con lo cual mejoran sus expectativas de integración laboral por sus mayores competencias formativas. Con todo, es un porcentaje de vacantes superior al de un año atrás cuando podían optar al 7,7%.
En palabras de Encarna Maroño, directora de Recursos Humanos de Adecco: «si bien es cierto que estos criterios en las ofertas ayudan a las empresas a identificar el perfil que están buscando y a optimizar la criba curricular, es aún más cierto que, durante el proceso de selección, los años de experiencia y, especialmente, la edad cada vez cobran menos protagonismo. Los consultores de selección son absolutamente conscientes de que las competencias y la actitud están por encima de todo ello».
Y añade: «la motivación para incorporarse a un equipo de trabajo, la capacidad para aprender cosas nuevas, la creatividad, el compromiso con los objetivos de la organización, las ganas de crecer dentro del a compañía, etc. son algunas de las características que más valoramos dentro de los procesos de selección y que nos permiten ver la adecuación del candidato más allá de la experiencia previa en el puesto de trabajo o la edad que tenga».
En el mismo sentido, Jorge Guelbenzu, director general de Infoempleo, añade que «las empresas deben seguir trabajando para que sus equipos integren perfiles con diversas competencias, habilidades, conocimientos y edades. Elegir a la persona correcta para el puesto debe ser la máxima que rija en los procesos de selección y no la edad. Las personas mayores de 45 años son un gran activo para las compañías gracias a su prolongada experiencia porque cuentan con muchos conocimientos para aportar y compartir».
Y concluye: «debemos trabajar para no dejar fuera del mercado laboral a los más jóvenes y su talento. Es importante que todos apoyemos a ambos grupos y para ello tenemos la obligación de poner en valor lo que cada uno de ellos puede aportar».
Lo que sí queda claro analizando las ofertas de empleo es que la relación directa que se establece entre categoría profesional y media de edad solicitada en la oferta de empleo implica que los puestos de mayor categoría, directivos y mandos, requieren profesionales de mayor edad, 38 y 36 años de media, respectivamente, que la indicada para cubrir puestos técnicos y empleados, donde la media de edad requerida baja hasta los 34 y 33 años, respectivamente.
Sectores y áreas funcionales
Si atendemos al porcentaje de ofertas que requieren edad, Comercio, Banca e inversión y Otros servicios son los sectores en los que se da más importancia a este requisito. El sector de la Enseñanza se mantiene como el que requiere una media de edad más alta, concretamente, 34,6 años. Le siguen de cerca Servicios, Distribución al por mayor, Banca e inversión y Seguros.
En el lado contrario se encuentran Telecomunicaciones, Informática, Hostelería y turismo y Consultoría, los sectores que, de media, buscan profesionales más jóvenes, aunque siguen rondando en torno a los 32-33 años.
En cuanto a las áreas funcionales, el segmento de edad que más aparece en las ofertas de empleo es el de 31 a 35 años. Hasta hace cuatro años, en toda la serie histórica, la franja de edad más solicitada era de 26 a 30 años, lo que refuerza la idea de que, en la actualidad, los profesionales de RR HH buscan una mayor madurez en sus candidatos.
Legal es el área en el que más ofertas de empleo especifican la edad que deben tener los aspirantes (47%), seguida por el área de atención al cliente (45%) siendo en ambos casos el segmento de edad de 31 a 35 años el más demandado.
De media, la mayor valoración de la edad viene desde Administración de empresas (35,6 años), Recursos Humanos (34,7 años) e Ingeniería y Producción (34,3 años). Mientras que las áreas funcionales de Tecnología (32,8 años), Legal (33,3 años) y Comercial (33,4 años) son las que menor edad solicitan en sus ofertas de empleo…