En los aviones del futuro la clase turista podría ser más cómoda
uede que los vuelos comerciales hayan perdido el mítico atractivo de épocas pasadas, con aviones atestados, comidas poco apetecibles y el prematuro ocaso del majestuoso Airbus A380. No obstante, las compañías aeroespaciales siguen intentando mejorar la experiencia de los pasajeros a bordo de un avión. En el mundo hipercompetitivo de la aviación, una mayor comodidad de cabina puede ser un importante argumento de venta para las aerolíneas, y la comodidad de la cabina (o la ausencia de ella) son con frecuencia objetos de comentarios en las plataformas de redes sociales.
En la exposición anual Aircraft Interiors Expo en Hamburgo, el mayor escaparate para innovación de cabina, cientos de expositores han presentado nuevos asientos, telas, luces, sistemas de entretenimiento en vuelo o conceptos de diseño creativo. Una gran tendencia en la feria de este año: utilizar de forma más eficiente los datos que se generan en la cabina para ofrecer una experiencia más personalizada a los pasajeros, apoyar a los auxiliares de vuelo y mejorar el mantenimiento de los complejos asientos de clase de negocios o áreas de cocina…