Cuál es la nueva receta del Fondo Monetario para que los países salgan de una crisis
En su primer discurso formal como directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, se abstuvo mencionar el caso argentino, y prefirió concentrarse en los desafíos que plantea un nuevo escenario internacional, en particular por las disputas comerciales entre los EEUU y China y sus efectos en 2020: «Para la economía mundial, el efecto acumulativo de los conflictos comerciales podría significar una pérdida de alrededor de USD 700 mil millones, o alrededor del 0,85 del PBI. Como referencia, esto es aproximadamente del tamaño de toda la economía de Suiza”, o una vez y media el PBI de la Argentina.
Sin embargo, de su amplio y sesudo mensaje, se pueden extraer conceptos que pueden tener claras implicancias sobre la economía argentina, según sean las políticas que se adopten. Por ejemplo:
1. “A pesar de la desaceleración general, se pronostica que cerca de 40 economías de mercados emergentes y en desarrollo tendrán tasas de crecimiento del PBI reales superiores al 5%, incluidas 19 en África subsahariana. Aunque en algunas de las economías de mercados emergentes más grandes, como India y Brasil, la desaceleración es aún más pronunciada este año. En China, el crecimiento está bajando gradualmente del rápido ritmo que vio durante muchos años”.
Esto significa una buena noticia para la Argentina, proveedora principalmente de alimentos al resto del mundo, porque las economías emergentes tienen mayor propensión al consumo que las desarrolladas y avanzadas, y por tanto prenuncia más compras de producción nacional, si no se desaprovecha la oportunidad con la suba de impuestos al comercio exterior que desalienten la inversión productiva.
Las economías emergentes tienen mayor propensión al consumo que las desarrolladas y avanzadas, y por tanto prenuncia más compras de producción nacional, si no se desaprovecha la oportunidad con la suba de impuestos al comercio exterior
2. En alusión a la guerra comercial entre los EEUU y China, la directora gerente del FMI estimó: “implicará una caída del comercio global en unos USD 700 mil millones para 2020”, casi una vez y media el PBI de la Argentina. Y agregó: “La clave es mejorar el sistema, no abandonarlo. El acceso a nuevos mercados es esencial para elevar el nivel de vida. Cuando se trata de mejorar la vida de las personas, el trabajo duro comienza en casa. Aprendí esta lección de primera mano al crecer detrás de la Cortina de Hierro. Vi los altos costos de las malas políticas. Y también vi cómo un cambio hacia buenas políticas, con apoyo internacional, puede ayudar a que un país y su gente vuelvan al camino de la prosperidad”.
De ahí se desprende que la recomendación de política económica de la nueva conducción del FMI es abrirse más al mundo, para mantener un comercio activo, mejorando el acceso a los mercados, más a que limitarlos o descuidarlos, con más impuestos.
Se desprende que la recomendación de política económica de la nueva conducción del FMI es abrirse más al mundo, para mantener un comercio activo, mejorando el acceso a los mercados, más a que limitarlos o descuidarlos, con más impuestos
3. “Las tasas bajas prolongadas también conllevan efectos secundarios negativos y consecuencias no deseadas. Piense en los fondos de pensiones y las compañías de seguros de vida que están asumiendo inversiones más riesgosas para cumplir sus objetivos de rendimiento. En nuestra vigilancia, vemos un aumento de la toma de riesgos por parte de los inversores en todo el mundo”.
Para la Argentina esa definición puede leerse como la recomendación del mantenimiento de tasas reales de interés positivas, niveles nominales superiores a la tasa de inflación. “En algunos países, las empresas están utilizando tasas bajas y acumulando deuda para financiar fusiones y adquisiciones en lugar de invertir”, observó Georgieva…