Construcción 4.0: ¿Está el sector en peligro de ser «uberizado»?
La disrupción tecnológica va a llegar, y está ya llegando hasta los sectores más recónditos de nuestras socioeconomías. El alto impacto que caracteriza a todas las nuevas tecnologías que están viendo la luz en nuestros días, hace que tanto su amplio espectro de aplicabilidad, como lo enormemente disruptivo de sus nuevos avances, nos permitan afirmar a que dentro de unos años no habrá sector ni industria que podamos reconocer al comparar con la forma en que la concebimos a día de hoy, incluso los casos más insospechados.
Algunos analistas pensaban que sectores tan tradicionales como el de la construcción aparentemente estaban algo más a salvo de la transformación IT. Los argumentos que esgrimían eran principalmente por lo ligado que este sector está a la construcción de elementos físicos, en los que la innovación podría pensarse que tiene un alcance más limitado. Pero en realidad las constructoras también van a ver una profunda revolución en su concepción como empresas y como sector económico. Es por ello por lo que podemos hablar ya abiertamente de la Construcción 4.0, y analizamos hoy todo lo que en este importante sector económico está por venir de la mano de las tecnologías más disruptoras.
Las constructoras no temen por su futuro, pero deben saber que van a tener que reinventarse como toda empresa
En todo sector económico ya establecido y consolidado, especialmente en los más tradicionales, un error típico de gestión en el que sus directivos incurren es en no saber verle las orejas al lobo antes de que sea demasiado tarde. Sentirse seguros en su distribución actual del mercado, pensar que su trozo del pastel no se lo puede arrebatar nadie después de tantos años de reparto más o menos estable, no acabar de creer en nuevos modelos de negocio de empresas jóvenes y startups que no ven que pueden acabar siendo los líderes del futuro, son actitudes bastante frecuentes que tienen que ver más con la naturaleza humana de los directivos que con peculiaridades de cada sector económico.
Recientemente, el diario online El Español publicó un artículo con título «Las constructoras no temen ser ââ¬Ëuberizadasââ¬â¢, pero Tesla las pone en alerta», que resulta más que ilustrativo sobre las actitudes tan poco visionarias que les acabo de comentar. Como pueden leer en el enlace anterior, estas compañías no contemplan actualmente un escenario de disrupción tan severa como la vista en otros sectores, y al menos su escenario es que ésta disrupción no va a llegar a la construcción de forma tan acelerada. Si tras estas afirmaciones se esconde la actitud clásica de esperar y ver tranquilamente cómo va evolucionando la tecnología en el sector, es de temerse que la industria esté cayendo en el mismo error que han caído otros gigantes de otros sectores, y que hoy ya ven amenazada no sólo su anterior hegemonía, sino incluso su misma supervivencia como empresas.
Efectivamente parece que la tecnología avanza a otro ritmo en el sector de la construcción, pero lo disruptivo de lo que parece que está por venir no es ni mucho menos para estar tranquilamente observando el mercado desde la atalaya. La evolución exponencial de la tecnología de nuestros días, así como la rapidez en su adopción que ha quedado a la vista en otros sectores, no evitan un escenario en el que en cualquier momento puede llegar un avance tremendamente disruptivo que acabe por revolucionar el sector, y que podría sacar del tablero a algunos de los actuales líderes.
Siendo como es el sector de la construcción uno de los sectores tradicionalmente más importantes de la economía española (permítanme abrir un paréntesis durante la reciente crisis inmobiliaria), no nos podemos conformar con estas actitudes de esperar y ver. Supone un riesgo más que posible de que se materialicen los riesgos potenciales, y de que los líderes del sector pierdan su tradicional hegemonía a manos de nuevos jugadores que, además, posiblemente vengan del extranjero a juzgar por la actitud predominante a nivel nacional…