¿Alquiler de oficinas o coworking en Madrid? Un cara a cara imprescindible

Los tiempos cambian y, con ellos, las necesidades y opciones a disposición de las empresas. Hace años se hacía inconcebible pensar en la idea de que un trabajador pudiera desarrollar su actividad laboral desde casa, y este 2020 ha dejado claro que es posible. Hace años, también, resultaba ilógico que profesionales de diferentes negocios y especialidades cooperaran en un mismo espacio a diario.

Ahora es algo de lo más habitual. Los negocios tienen a su alcance la posibilidad de recurrir al alquiler de oficinas, como se ha hecho desde siempre, o apostar por la propuesta del coworking, algo más reciente. ¿Cuál es mejor opción de las dos? La respuesta es algo ambigua, porque al final depende de las necesidades y condiciones tanto de trabajadores como de empresas. Pero vamos a ayudar a despejar dudas sobre ambas.

Alquiler de oficinas y coworking, las mejores opciones para tu negocio

¿Cuál es mejor? Repetimos la pregunta, aunque volvemos a adelantar que, al final, son las necesidades y las características del negocio las que determinan la respuesta. Es posible que tu empresa funcione perfectamente en una oficina y no necesite lanzarse al coworking. Pero también es posible que tengas muchos trabajadores que prefieran un entorno diferente.

Vamos a repasar ambos conceptos y todo lo que implica recurrir a una u otra opción. En los últimos años, es cierto que el coworking ha ido ganando mucho terreno, sobre todo en las empresas más jóvenes y las startups. No obstante, eso no significa que siempre sea la mejor opción para un negocio. Más ahora, que el trabajo en remoto está ganando tantísima fuerza a raíz de todo lo que ha pasado en 2020.

Este careo entre ambas opciones puede servir para terminar de inclinar la balanza hacia un lado o hacia otro. Al menos, esperamos que te sea útil para ver lo que ofrece cada variante y cuál crees que puede encajar mejor con tu negocio o con tu actividad como profesional. Puede incluso que ninguna de las dos te sirva y busques algo distinto. Porque, como ya hemos dicho, lo importante es que tu empresa tenga lo que más le sirva para crecer.

Alquiler de oficinas en Madrid

Hay numerosas oficinas en alquiler en Madrid, de hecho, el abanico es tan amplio que existen opciones para prácticamente cualquier negocio, tanto a nivel de instalaciones como de precios. Ahora bien, ¿por qué decantarse por alquilar oficinas en la capital y en la provincia en lugar de optar por el coworking? Es el sistema más tradicional y el más extendido, y lo cierto es que razones no le faltan.

Para empezar, trabajar en una oficina permite que todo el entorno de trabajo esté bien centralizado. Sí, es cierto que cada vez se apuesta más por el trabajo en remoto gracias a las nuevas tecnologías, pero el entorno laboral de estas instalaciones suele favorecer la productividad de los trabajadores. Para empezar, porque no van a tener problemas a la hora de desarrollar su actividad. Siempre tienen a su disposición los recursos que necesitan, como también las instalaciones necesarias para ello.

Conexión a internet de buena velocidad, equipos informáticos con prestaciones adecuadas, hasta material de oficina que se usa a diario. Todo eso está más que garantizado en una oficina, aunque lo más interesante de todo esto es la facilidad para coordinar la actividad. Al compartir el mismo techo de trabajo, todos los departamentos pueden colaborar con mucha más eficiencia y tienen una mayor comunicación. De hecho esta es completamente directa.

Por encima de todo está el hecho de que los trabajadores comparten un espacio que les ayuda a conectar mejor entre ellos, consiguiendo que el equipo se refuerce y haya un mayor apoyo mutuo. Esto es indispensable, ya que genera unas sinergias imprescindibles para el correcto crecimiento de la empresa. ¿Y qué inconvenientes hay entonces con alquilar oficinas? Pues su precio. Siempre serán más caras que optar por un coworking.

Coworking en Madrid

La otra opción más frecuente es la del coworking en Madrid. En la capital hay muchos espacios de trabajo compartidos disponibles, y lo cierto es que la gran mayoría cuentan también con unas instalaciones de primera. Conexión a internet con fibra óptica, servicios de cafetería y grandes salas para poder trabajar sin problema alguno. Desde luego, es un sistema con razones de sobra para decantarse por él.

Para empezar, porque es mucho más económico. En un coworking, son varias las empresas que tienen que afrontar el gasto del recinto y sus servicios, en lugar de recaer todo sobre los hombros de una sola. Para los negocios más pequeños es una buena opción, ya que su poder adquisitivo es menor. Gastan menos y, aun así, tienen a su disposición un buen lugar para desarrollar su actividad profesional. Aunque, por otra parte, no es un lugar único y exclusivo para ellos.

Lo bueno de compartir lugar con otros es que también da pie a más oportunidades de negocio. Es compartir el día a día con profesionales de otras empresas y de otros sectores. Gracias a eso, pueden surgir conversaciones con las que plantear nuevos servicios o productos en conjunto, incluso algún tipo de fusión a largo plazo. El networking se dispara, y eso siempre viene bien para las empresas que buscan nuevas ideas, ya que el coworking lo favorece por completo.

Lo último y también importante es que estos entornos de coworking son mucho más flexibles que una oficina al uso. Permiten el acceso a trabajadores de toda clase y pueden servir para poner en marcha toda clase de iniciativas. Las oficinas, en cambio, están más limitadas en este sentido ya que suelen estar mucho más orientadas a una metodología de trabajo más específica.

Elegir puede resultar complicado, pero opciones hay de sobra. En Madrid existen numerosas oficinas para alquiler disponibles, como también muchos entornos para coworking de calidad. No tienes que preocuparte por eso, porque las opciones disponibles son muy buenas y van a garantizar que puedas trabajar, o que tus empleados puedan trabajar, sin inconvenientes de ningún tipo.