13 ideas constructivas para implementar en tu empresa
En mi anterior colaboración del 3 de junio pasado «El Origen de las Ideas Constructivas en las Empresas», planteé una serie de elementos, de dónde surgen esta clase de ideas y cómo deben promoverse en las empresas, principalmente en las pymes, sobre la creatividad y la iniciativa entre todos sus empleados y obreros, no solo entre sus consejeros y directores.
Al leer el artículo anterior, en la imaginación de cualquier lector inquieto, surgiría, la pregunta: ¿Cuáles ideas constructivas podrían proponerse para la empresa que estoy trabajando? Aunque las posibilidades al respecto, pueden ser innumerables, dependiendo del tipo de empresa y de la persona que las propone y la que las acepta, propongo iniciar con las siguientes:
1. Que tal, si considerando el crecimiento histórico y potencial de nuestra Pyme o empresa grande, en lugar de seguir solicitando préstamos a instituciones financieras, con el consecuente pago de intereses y comisiones, nos decidimos a evaluar la posibilidad de colocar parte del capital de nuestra empresa en la Bolsa Mexicana de Valores para financiar nuestros proyectos productivos.
2. Que tal, si contratamos tanto ejecutivos, como asesores y auditores externos más capacitados y con mayor visión de negocios para impulsar el crecimiento y el desarrollo de nuevas y mejores eficiencias operativas y administrativas en nuestras empresas.
3. Que tal, si decidiéramos en nuestra empresa disfrutar de las ventajas de tener un sistema de gobierno corporativo eficiente, para dar una mejor imagen a la comunidad empresarial y a nuestro Consejo de Administración.
4. Que tal, si vamos planeando la sucesión del director general, directivos relevantes y de nuestros miembros del consejo del consejo, para asegurarnos tener en el largo plazo un mejor gobierno corporativo y mejores decisiones en nuestra empresa.
5. Que tal, si no nos obstinamos en pensar que nuestros productos y servicios que ofrecemos a nuestros clientes son los mejores, y en lugar de ello, exploramos traer nuevos y mejores conceptos de líneas de productos y servicios, afines a nuestro giro, que han tenido éxito en otros países desarrollados y emergentes.
6. Que tal, si incluso platicáramos y negociáramos con esas empresas innovadoras extranjeras, para ser sus distribuidores o socios, ofreciéndoles nuestra experiencia, éxito empresarial y puntos de distribución.
7. Que tal, si sondeamos en el mercado, cuáles otros sistemas más efectivos y rentables existen para reducir el consumo de electricidad, gas y otros combustibles para reducir nuestros costos de producción y gastos de operación.
8. Que tal, si aprovechamos la oportunidad que México otorga de ser la segunda nación del mundo con más tratados firmados de libre comercio en el mundo, como con la Unión Europea, Japón y el Acuerdo Estratégico Trans-Pacifico de Asociación Económica (TPP), para incrementar nuestra base exportadora a un mayor número de países, para no solo depender de nuestras exportaciones hacia la unión americana.
9. Que tal, si nos pusiéramos a pensar en desarrollar nuevas y más efectivas ideas de Valor Agregado para conservar y atraer más clientes y diferenciarnos de la competencia.
10. Que tal, en caso de ser exportadores, ahora que está elevado el valor del dólar americano, si contratamos coberturas cambiarias, para asegurar un mayor valor a nuestras exportaciones por un periodo prolongado de tiempo.
11. Que tal, si contratamos un especialista en instrumentos financieros derivados, para planear mejor el nivel del tipo de cambio del dólar para los siguientes doce meses, ya sea, que seamos exportadores de productos o importadores de insumos o productos extranjeros.
12. Que tal, si realizamos una adecuada y profunda evaluación financiera de nuestros proyectos de inversión, en lugar de decidir «al tanteómetro» o a nuestras «corazonadas», cada vez que pensamos en llegar a abrir una nueva línea de producción, una fábrica, una tienda, un centro de distribución o comprar maquinaria nueva.
13. Que tal, si para la construcción de nuestro nuevo edificio, planta, almacén o tiendas, nos aseguramos que se paguen los volúmenes de obra reales, contratando un empleado profesionista o un asesor externo experto en auditorías técnicas, para que en forma independiente a la administración de la obra, determine y compare los volúmenes reales Vs. los volúmenes facturados, para así identificar los pagos en exceso. Mi experiencia señala que en todas las obras privadas siempre hay diferencias pagadas de más del uno al quince por ciento.
14. Que tal, si en nuestra Pyme o empresa grande, nos decidimos a identificar y establecer los Indicadores de Desempeño necesarios para controlar mejor todas nuestras operaciones en sus operaciones de compras, producción, mantenimiento, distribución, ventas y contabilidad, estableciendo un sistema de estadísticas y gráficas al respecto.
15. Que tal, si pensamos en instalar un efectivo sistema integral de información, en lugar de tener sistemas separados entre sí, para controlar de mejor forma las diversas fases operativas de nuestra empresa, de las compras, producción, distribución, ventas y contabilidad de nuestra empresa.
Los anteriores son solo unos cuantos ejemplos iniciales de ideas constructivas, que pueden ayudar a nuestra empresa a hacerla más eficiente y rentable, las cuales son recomendables impulsar, para no solo incrementar las utilidades, sino para mantenerla en el mercado ante el embate de la competencia, que puede poner en riesgo su continuidad…