Selfcoaching para abordar la vida de manera creativa
Vive cuanto puedas, no hacerlo sería un error. No importa a qué te dediques en particular, siempre y cuando dispongas de tu vida. Si no eres dueño de tu vida, ¿qué te queda? – Henry James
Cómo abordar la vida de manera creativa
En nuestra metodología consideramos el dominio personal como una disciplina básica para abordar la vida de manera creativa. Con su expansión crearás los resultados que más te importan. Abordarás la vida como un artista aborda una obra de arte o un deportista de elite la preparación de un campeonato del mundo. Lo hacen consagrándose a un selfcoaching incesante, a un aprendizaje continuo.
Las personas con alto nivel de dominio personal expanden continuamente su aptitud para crear los resultados que buscan, su futuro deseado, sus objetivos prioritarios.
Lo extraordinario, aunque pocas personas lo tienen en cuenta, es que esta visión sólo depende de ti.
Tú tienes el poder de reivindicar, cambiar o ampliar tu visión y, por tanto, tu futuro deseado.
Estás en una encrucijada. Puedes olvidar tu pasado y transformarte en quién quieres convertirte.
Si decides actuar creativamente, pensar, sentir como la persona que quieres ser, podrás llegar a ser esa persona.
En lenguaje coloquial la palabra dominio sugiere la dominación de personas o cosas. Concepto que no tiene nada que ver con el significado que le damos nosotros.
Entendemos que dominio también tiene un sentido de nivel de habilidad, la de un maestro artesano, un artista, un deportista, que tiene un dominio especial sobre su actividad. Se manifiesta en el resultado de su trabajo sin que ejerza ninguna dominación sobre sus materiales, personas ni cosas.
El dominio propio es la disciplina básica del coaching creativo y, a la vez, expandir su nivel, es la finalidad del coaching contigo mismo o selfcoaching.
Conduce a una sensación de conectividad especial que produce una visión más amplia de la identidad y del futuro. Hemos comprobado que a medida que una persona adquiere un mayor nivel de dominio propio, entiende mejor los sistemas en que vive, y, a medida que comprende con mayor claridad las presiones operantes, desarrolla de manera natural más comprensión y empatía. Así como un artista llega a dominar un arte mediante un aprendizaje y práctica continua, tú también, con sesiones de coaching personal y, sobre todo con selfcoaching, expandirás permanentemente tu dominio propio.
Es un proceso de realimentación. Es una disciplina que se integra en la persona y puede durar toda la vida.
Las personas con alto nivel de dominio personal son muy conscientes de su ignorancia, de sus errores, su incompetencia, y, también, de sus zonas de crecimiento. Aunque parece una contradicción, sienten una gran confianza en sí mismas.
Las personas con alto nivel de dominio propio tienen un sentido especial de la visión, la transforman progresivamente en vocación. Ven la realidad actual como un aliado y no como un enemigo. Aprenden a percibir las fuerzas del cambio y a trabajar con ellas en vez de resistirse.
Consideran, con Peter F. Drucker, que el modo más eficaz para gobernar el cambio con éxito es crearlo. Lo ven como una oportunidad en lugar de una amenaza. Se sienten conectadas con otras personas y con la vida misma. Se sienten parte de un proceso creativo más amplio en el cual pueden influir sin controlarlo unilateralmente.
¿Cuál es la esencia del dominio personal?
Dos preguntas clave cuya respuesta constituyen la esencia del dominio personal:
- ¿Sabes continuamente lo que es importante para ti?
- ¿Tienes conciencia clara de tu realidad actual?
La primera pregunta es como un foco luminoso que te ayuda a clarificar lo que auténticamente te importa.
¿Cuántas veces has pasado el tiempo afrontando problemas que te crean una visión borrosa e imprecisa de lo que realmente quieres?
La segunda es otro foco que te ayuda a ver continuamente con mayor claridad tu realidad actual.
¿Cuántas veces te has atascado en relaciones contraproducentes insistiendo en fingir que todo iba bien?
Al dirigirte hacia un futuro deseado es indispensable que sepas dónde estás ahora.
La diferencia, la brecha, entre tu visión y una clara conciencia de tu realidad actual genera lo que denominamos tensión creativa.
La tensión creativa es la fuerza que nos impulsa a reducir la brecha entre visión y realidad actual.
Esta tensión creativa constituye la esencia del dominio personal si sabes aprender a generarla y sostenerla.
¿Qué significa visión personal?
La visión personal significa tu futuro deseado. Un destino concreto y específico, tus objetivos prioritarios.
La visión nace por dentro, aunque la mayoría de personas tienen poco sentido de su visión real. Hace unos meses le preguntaba a una chica argentina,
- ¿Que era lo que más le importaba?
- Contestó, que le aprobasen su normalización, los papeles para trabajar y residir en España.
Lo contestó rápida y con cierta inquietud, como si fuese una cosa que necesitaba indispensablemente.
Seguimos
- Habló de dudas sobre distintas posibilidades de trabajo que le permitiesen sobrevivir y prepararse para lo que realmente le importaba: grabar un disco de tangos con versión moderna, promocionarlo y venderlo en todo el mundo.
- ¿Para cuándo?
- Me gustaría hacer la presentación el próximo verano 2008 en Buenos Aires y Barcelona simultáneamente. Lo tendré todo preparado. Los ojos se le nublaron y le cayeron unas lágrimas. Esta vez su expresión no era de necesidad, tenía un significado profundo. Esta era su auténtica visión. Había costado llegar a ella. Nos habíamos detenido bastante tiempo en trabajos que no le interesaban y tenía dudas ante posibles relaciones contraproducentes. Había contestado sobre cosas de las que quería liberarse. Cosa que pasa con frecuencia.
La visión no puede comprenderse sin una idea de propósito. Propósito es similar a dirección, a vocación.
La visión es concreta.
El propósito abstracto.
El propósito de esta chica era ser cantante, autora y promotora de tangos en versión moderna. Su visión, tener un disco grabado el próximo año y presentarlo en verano simultáneamente en Buenos Aires y Barcelona.
Hemos experimentado que nada importante ocurre sin que exista una visión. A la vez, una visión sin propósito, sin vocación, es sólo una buena idea.
Es muy expresiva la exclamación de Macbeth: ruido y furia que nada significan.
La visión es genuina y plural. El entorno de cada uno suele influir en nuestra visión. Normalmente a la mayoría de personas les cuesta identificar y hablar de sus visiones. Porque tenemos miedo de la brecha entre nuestra auténtica visión y la realidad. La chica argentina ya había pensado que quería grabar un disco, venderlo y promocionarlo con actuaciones en directo pero le dominaba la necesidad de trabajar en otras cosas.
Otro decía en un taller: me gustaría independizarme y crear mi propia empresa pero no tengo suficientes ahorros todavía. Otra, en el mismo taller, quiero estudiar Historia del Arte aunque no estoy muy decidida, me dicen que tiene muy pocas oportunidades de trabajo.
Sus brechas les crean un estado de desaliento, llegan a temer y pensar que son fantasiosas. Pueden llegar a desecharlas o angustiarse.
Es muy normal que te sientas inseguro para expresar tu visión. Se necesita normalmente mucho coraje para mantener visiones que no congenian con el tono general de nuestro entorno. Otras veces, porque la brecha entre visión y realidad es muy grande.
Pero precisamente este coraje es el que distingue a las personas de alto nivel de dominio propio.
Como dicen los japoneses acerca del gran maestro: ni siquiera el espesor de un cabello se interpone entre su visión y su acción.
¿A qué se refiere la realidad actual?
La realidad actual es la contestación a la segunda pregunta:
¿Tienes conciencia clara de tu realidad actual?
La realidad actual se refiere a ti y tu entorno, tus recursos, tu impotencia y tus posibilidades:
¿Qué tienes? ¿Qué te falta? ¿Dónde estás? ¿Dónde quieres ir? ¿Cómo te encuentras?
El proceso de toma de conciencia de tu realidad actual verdadera, es fundamental para establecer las estrategias adecuadas para atraer tu visión, alcanzar tus objetivos y desarrollar tu dominio personal.
Para identificar tu realidad actual hemos diseñado un proceso que te ayudará a encontrar recursos, aprender donde estás en cada momento, cuáles son tus sentimientos en relación al objetivo deseado y lo que también es muy importante, lo que te lo impide, el conflicto estructural. Hay que indagar para saber la verdad, la realidad más real posible. Todo esto es muy importante. Tu realidad actual es la base de toda estrategia orientada a alcanzar tu visión.
¿Qué es lo que produce la tensión creativa?
La brecha es la que produce la tensión creativa, una fuente de energía creativa.
Como hemos dicho, constituye la esencia del dominio personal. Integra todos los elementos de esta disciplina fundamental.
La brecha determina las acciones para moverse hacía la visión.
En nuestros talleres utilizamos la metáfora de la banda elástica, una banda de goma estirándola entre dos dedos, uno de cada mano, que representan el de la derecha la visión y el de la izquierda la realidad actual.
Al estirarse se produce una tensión: ¿Qué tendencia tiene esta tensión?
La de su disminución y anulación. ¿Cómo podemos eliminarla o reducirla?
De dos maneras: Acercando la realidad actual hacia la visión o la visión hacia la realidad actual. Lo que ocurra depende de ti.
La tensión creativa es uno de los principios clave del dominio personal.
Sin embargo, muchas personas, coaches, otros profesionales del comportamiento humano, consejeros, padres, todavía no han comprendido que la tensión creativa no implica ansiedad, angustia ni estrés. Es una fuerza que inicia su actuación cuando tomamos conciencia de la brecha entre la visión y la realidad actual sin ninguna sensación especial. Mucha gente cree que el proceso creativo consiste en sufrir un estado de ansiedad y estrés.
Hemos podido comprobar que la tensión emocional, que puede surgir, no constituye la tensión creativa. La tensión creativa no produce ningún estado de este tipo. Al contrario, produce un estado creativo que cambia la tensión emocional y también otros estados.
Si no llegamos a entenderlo pueden disponernos a rebajar la visión. Cuando estamos insatisfechos, ante una visión, podemos sentir el impulso de aligerar la carga. Su remedio es inmediato: rebajar la visión. Podríamos poner muchos ejemplos que comprobamos en sesiones y talleres con comentarios típicos. De esta manera es muy fácil reducir la tensión emocional pero el precio es muy caro: el abandono de tu visión, lo que realmente te importa.
Soy adipta a su web y especialmente a este autor. ¿Por qué hace tiempo que no publica otro artículo…?
También lamento que este artículo sea de los mnos visitados de este autor y menos comentado. Aunque puede que sea debido al tema yo, considero, que si se lee en profundidad ´constituye la esencia de los demás.
Bs As 12-5-2009
Desde que estuve en España y estudié con el autor vengo siguiéndole en De Gerencia por el impacto que me produjeron sus talleres.
He repasado este artículo porque lo considero fundamental para un profesional que se dedica ha aplicarlo a los demás.