La imagen española, por los suelos
La imagen de España alcanza su punto álgido en 1992, con los Juegos Olímpicos, la Exposición Universal en Sevilla y tras la entrada en la Unión Europea. Cientos de millones de personas vieron en televisión y millones en persona, un país nuevo, moderno, joven y eficaz. Barcelona se convirtió rápidamente en una de las ciudades más interesantes del mundo y en modelo para otras muchas. La imagen de Barcelona y la de España se integraron perfectamente. Barcelona representaba mundialmente a España…