Viajar al exterior: ¿dónde rinde más nuestro dinero?
Disponer de un cierto presupuesto para gastar en un viaje, cuesta lo suyo. Trabajo, esfuerzo, imaginación. Por ello, al momento de invertirlo en un viaje, deberíamos considerar dónde sacarle mayor provecho.
Las condiciones económicas no son similares en todos los países. Las economías locales sufren los vaivenes de sus políticas gubernamentales, de las condiciones propias del país en cuanto a producción, el endeudamiento, las reservas monetarias de cada lugar son distintas, los criterios de distribución de la riqueza, las costumbres comercialesâ¦
Tipo de cambio
En fin que cada país es como un hogar. Cada familia tiene ingresos diferentes y hace usos distintos del capital, por lo que algunas tienen un buen nivel de vida a fuerza de producción y ahorro, y otras viven empeñadas y su trabajo no le rinde como a otras.
Estos desniveles se notan también en el valor de la moneda local de cada país o tipo de cambio. No hace mucho tiempo, Europa contaba con distintas divisas y las oscilaciones internas nos hacían âespecularâ con que una cierta cantidad de dinero ârendíaâ mas en un vecino país que en otro.
Lo mismo ocurre hoy en día en muchos lugares del mundo. Para poder aprovechar las ventajas comparativas de viajar con euros en el bolsillo, hay que conocer un poco la situación del país que queremos visitar y su tipo de cambio.
Destinos
A pesar de las idas y vueltas de la crisis global que nos toca a todos, quedan destinos donde hacer cundir un poco más nuestro dinero.
Los países europeos que no tienen el euro como moneda son una alternativa cercana y atractiva. Entre ellos encontramos a Croacia, Montenegro o Albania.
Por ejemplo: en ciudades como Skopje (Montenegro) un menú de 3 platos con cerveza puede costarnos unos 8 euros por persona, y si viajamos al interior, aún menos. En cuanto a hostelería, en zonas turísticas de montaña podemos encontrar alojamiento en centros de esquí por 25 euros por persona y noche. En cuanto a la playa, desde apartamentos turísticos ( 8 euros por persona y noche en base a 6 personas) hasta hoteles de tarifa internacional (desde 60 euros por habitación doble y noche).
El Reino Unido ha sido tradicionalmente un destino âcaroâ, pero la caída del valor de la libra a cambiado el panorama. Los viajeros que lleven euros en el bolsillo, obtendrá ahora más libras que las que hubieran recibido hace 1 año atrás.
Sumado a ello, la caída del mercado turístico británico ha dado por resultado la aparición de excelentes ofertas hoteleras. Por lo que es un buen momento para visitar esos destinos británicos que habíamos postergado: Edimburgo, Liverpool y la siempre atractiva Londres, entre otros.
Los países que tienen al dólar como moneda o como valor de referencia suelen tener mejores precios para el viajero europeo. Es lo que ocurre con los destinos latinoamericanos como México, República Dominicana, Brasil, Panamá, Costa Rica o Chile.
En otros casos, la inflación interna conspira con esta conveniencia: tal es el caso de Argentina donde hay que estar muy alerta porque ciertos servicios a precio local son muy convenientes (gastronomía, por ejemplo), y en otros casos otros están a nivel de cualquier país del primer mundo (hoteles, por ejemplo).
Puedes disfrutar de una parrillada con excelente carne por unos 7 euros por persona (pagando en la moneda local, unos 40 pesos), pero si te descuidas, el hotel te saldrá lo mismo que en Málaga o Barcelona.
Los países del este europeo, además de sus innegables atractivos turísticos, están desarrollando una oferta de servicios interesantes. Los precios de los mismos, en moneda local, son considerablemente más económicos que los que pagamos a diario en casa. En este grupo tenemos a Ucrania o Moldavia, por ejemplo.
A modo de ejemplo digamos que en Kiev (Ucrania) tiene mil opciones gastronómicas. Si te sales de la cocina internacional y aprovechas la riqueza de la mesa local, podrás comer hasta morir (3 platos y con porciones gigantes que siempre puedes compartir) por unos 10 euros incluyendo la bebida y el postre.
Y por último, los países que forman parte de la Unión Europea desde hace poco, y que están viviendo un período de adaptación, permiten aprovechar las ventajas de precios más ajustados. Polonia es, tal vez, el caso más claro para visitar a buen precio.
Ahorrar el dinero necesario para salir de viaje nos lleva a hacer muchas cuentas, sacrificar algunos gastos y moderar el presupuesto. Sin embargo, podemos sacar un buen provecho de nuestro capital si sabemos elegir bien nuestro destino de viaje.