Así compraban los famosos el acceso de sus hijos a las mejores universidades de EEUU
La red de sobornos desarticulada por el FBI implica a 33 padres.
William Rick Singer, de 58 años, se ha declarado culpable de los cargos que le imputa el FBI. Él es el responsable del mayor escándalo académico que ha vivido Estados Unidos y el cerebro de la operación que ha puesto en duda el complicado sistema de admisiones en las universidades americanas más prestigiosas. El caso se ha identificado como Varsity Blues, en referencia a la película de 1999 (Juego de campeones, en España) que recoge los esfuerzos de un estudiante para acceder a una renombrada institución.
Desde 2011, Singer gestionaba una red de sobornos destinada a lograrla entrada en la universidad de hijos de padres ricos y famosos que no hubieran conseguido el acceso por sus propios méritos. Singer operaba a través de la empresa Edge College & Career Network, con sede en California y también conocida comoThe Key. La firma se presentaba como una herramienta para ayudar a padres y alumnos en el estresante proceso que supone acceder a la universidad. Detrás de esta declaración de intenciones se escondía una trama de sobornos que ascienden a 25 millones de dólares (22 millones de euros).