Cinco claves para no equivocarse al comprar una vivienda de inversión
La rentabilidad de la vivienda en estos momentos es muy atractiva, lo que aumenta el interés por la compra de activos. El sector residencial se perfila como un valor estratégico en el que invertir para, posteriormente, beneficiarse del alquiler de los inmuebles. No obstante, si se pretende apostar por ello, es importante que las viviendas susceptibles de ponerse en arrendamiento tengan ciertas características. Desde pisos.com, te damos pistas para escoger bien:
1 Zona consolidada. La ubicación es uno de los factores decisivos de la rentabilidad de una vivienda. Los inmuebles situados en áreas urbanas suelen ser más líquidos porque presentan una mayor demanda que aquellos inmuebles situados en las zonas rústicas. Las grandes capitales son las que aportan mayor seguridad porque se trata de mercados estables en los que las residencias no solo pueden ser arrendadas de forma tradicional, a largo plazo, sino que también tienen buena salida dentro del ámbito turístico y estacional.
2 Entorno con servicios. Aspectos como las infraestructuras y las dotaciones circundantes son de extraordinaria relevancia. La cercanía al transporte público es fundamental, siendo una parada de metro o de autobús en la puerta un valor que suma puntos. Asimismo, que la vivienda tenga colegios, hospitales, restaurantes o cines en las proximidades son clave para que nunca nos falte un inquilino. El ocio será importante para singles, mientras que las familias estarán más pendientes de los centros de enseñanza.
3 Extras y zonas comunes. Las cualidades de la finca en la que se sitúa la vivienda son otro de los aspectos que habrá que valorar porque dotan al inmueble de rentabilidad. Por ejemplo, una propiedad situada en una zona céntrica será todavía más atractiva si cuenta con plaza de garaje incluida. También serán bien recibidos otros extras como un trastero. De igual modo, las zonas comunes de una urbanización son muy apreciadas, desde la piscina hasta los jardines, pasando por pistas de pádel o un gimnasio.
4 Precio frente a renta. Es vital que exista una relación adecuada entre el precio por el que se compra el inmueble y la renta de alquiler que tendrá. En este sentido, el valor de compra del inmueble susceptible de arrendamiento resulta crucial para que como propietario se obtengan buenos niveles de rentabilidad una vez que la vivienda sea alquilada. Se debe estudiar al detalle las mensualidades por las que se están alquilando los inmuebles situados en la zona donde se localiza el piso que vamos a comprar.
5 Inquilinos solventes. El rédito de una vivienda de inversión depende también de que el arrendatario cumpla religiosamente con sus mensualidades. Hay que dirigirse a un perfil determinado, con solvencia y que aporte garantías de pago, ya que causa un gran impacto en la valoración de la propiedad. Más allá del scoring, habrá que asegurarse en la medida de lo posible de que el inquilino mantenga en buenas condiciones el inmueble.