Llega un sitio que permite que los empleados califiquen a la mejor y peor empresa para trabajar

Hay sectores, como el turismo o la gastronomía, que cambiaron radicalmente a partir de las reseñas y calificaciones de los usuarios. Otros están en camino pero casi ninguna empresa puede escapar hoy de ser «escrachada» en las redes si da un mal servicio.

Esta modalidad llegó incluso a las compañías en su rol de empleadoras. Ya no son solo los que buscan trabajo los que son evaluados, sino la propia firma que recluta. Así, ante dos ofertas, un candidato puede elegir la empresa que tiene mejor clima laboral o da más oportunidades de ascenso, según la opinión de ex empleados o trabajadores actuales.

Ya existían los rankings de las mejores empresas para trabajar. Y ahora llegó al país una plataforma de búsquedas laborales y ofertas de reclutamiento de personal que incorpora los “reviews” de empleados. Todos pueden opinar, siempre y cuando no sea ofensivo y cumpla ciertas reglas.

La estadounidense Glassdoor compró hace tres años a la brasileña Love Mondays, un sitio dedicado a evaluar ambientes laborales que ahora pasará a operar como Glassdoor, con webs exclusivas para la Argentina, México y Brasil.

Al frente de la unidad latinoamericana de la empresa está Luciana Caletti, una de las fundadoras de Love Mondays, que además de calificaciones de empresas tiene una comparación de salarios y la posibilidad de acceder a empleos en otros países del mundo en los que opera Glassdoor. Globalmente, tiene 60 millones de reviews y contenido de 9.000 compañías.

Para la ejecutivo, a pesar de la crisis, en la Argentina ven una demanda focalizada. “Hay en ciertas industrias compañías que están peleando por captar talentos, como en tecnología, donde hay mucha demanda y poca oferta”, cuenta Caletti y también menciona el sector de gas y petróleo.

“En los últimos años vemos un gran cambio en cómo los empresas perciben la plataforma. Primero, se sorprendían de ver reviews online. Pero después, empezaron a usarlos, aprovechando la transparencia en beneficio propio”, cuenta Caletti.

Según la ejecutiva brasileña, “no hay una compañía mala o buena para todos. Depende de cómo es el profesional. Expectativas realistas sobre una compañía ayudarán a que tenga éxito”.

“Glassdoor tiene 48 horas para moderar un mensaje y ponerlo online. Hay ciertas reglas de lo que se puede y no se puede decir sobre una compañía. Por ejemplo, solo se permite nombrar al CEO o el presidente, no se puede mencionar a ningún otro directivo por su nombre. Pero la empresa no tiene influencia sobre la calificación. Lo único que puede hacer es responder el review y lo mismo puede hacer cualquier usuario si cree que algo de lo que dice otro no es verdad. Pueden avisar y nosotros remoderamos el comentario”, explica Caletti.

En el país ya tienen 145.000 calificaciones de profesionales y miles de ofertas de trabajo, según la directiva. Por ahora atienden a los clientes desde Brasil. Si la demanda crece, prevén abrir una oficina en el país, para competir directamente con firmas como Zonajobs o Bumeran…