Así cierra el sector inmobiliario Mexicano en 2020 y lo que podemos esperar para 2021

Pronto terminará este año tan atípico y, a pesar del impacto que ha tenido la pandemia por covid-19 en el sector inmobiliario, este permaneció activo, aunque con caídas en las operaciones de la mayoría de subsectores como el corporativo y comercial. Y las cosas seguirán lentas quizá durante el primer trimestre de 2021.

Recordemos que el sector inmobiliario en México tenía previsto un crecimiento de 4% durante el 2020, tras una baja en el 2019 derivada del cambio de gobierno, evidentemente esta previsión no se cumplió, pero al final del primer semestre del 2020, se vivió un repunte, llegando a niveles solamente 8% por debajo del año pasado, siendo de agosto a noviembre los 4 meses con más alta tasa de demanda

Y el panorama que se vislumbra para los siguientes meses enfrentará al sector a los siguientes retos:

Habrá menor poder adquisitivo

A causa de la pandemia se han registrado pérdidas de más de 2 millones de empleos formales y más de 10 millones en empleos informales, que repercuten en la capacidad de compra de los mexicanos, lo que llevará a desarrolladores a ofrecer mejores productos a mejores precios.

Uso de la tecnología para procesos comerciales

Las empresas dedicadas a los bienes raíces tendrán que seguirse actualizando si quieren permanecer en el mercado. Es importante dominar las herramientas digitales que de igual manera ayudan al usuario final en la toma de decisiones.

De acuerdo con los expertos de Lamudi, uno de los movimientos clave en el sector fue el aumento de intención de búsquedas a través de internet que pasó del 90% al 99% debido al confinamiento.

Construcción de certidumbre

Es importante generar seguridad y confianza en los compradores que están dispuestos a invertir en propiedades, tomando las medidas necesarias para evitar los fraudes inmobiliarios, de los que he hablado en columnas anteriores.

La evolución del mercado durante este año tan complicado ha permitido identificar que nos encontramos ante las siguientes situaciones:

Un mercado de compradores, donde la persona dispuesta a invertir tiene más poder de negociación.
Aumento en el número de rentas de propiedades y desaceleración en el número de ventas.
Efecto migratorio a colonias secundarias e incluso a ciudades secundarias. Muchos usuarios han volteado a otras localidades donde pueden encontrar un inmueble más barato, por ejemplo en estados como: Querétaro, el Estado de México, Jalisco y Yucatán
Aumento de esquemas co-living por una necesidad económica.
Búsqueda de espacios funcionales que permitan trabajar desde casa.
Actualmente los precios promedio se mantienen sin alzas drásticas, pero a comparación del año anterior en los últimos 6 meses las casas, a nivel nacional, registraron un aumento del 11% y los departamentos un 8% en el tipo de operación en venta, esta situación podría mantenerse o reflejar ligeros ajustes dado que siguen siendo tiempos de incertidumbre y los desarrolladores mantienen cautela para iniciar nuevos proyectos.

Es un hecho que la recuperación proyectada para el 2021 será más lenta de lo que se había pensado a mitad de este año. Sin embargo, el sector es de los más resilientes, por lo que podrá reducir sus operaciones, pero jamás se detendrá.