¿Cuáles son los gastos de una empresa?
Hoy hablamos de los distintos gastos de la empresa, elementos que son fundamentales para asegurar el futuro de toda empresa. Una empresa bien gestionada debe tener analizados sus gastos de forma muy detallada y entender y controlar, no sólo cómo estos impactan su negocio, pero cómo se desarrollan con cambios en su negocio, y especialmente con reducciones del negocio.
Parte importante de este análisis de gastos es su impacto sobre la política de precios y de producción. Es decir, qué precios las empresas fijan para sus productos o servicios son influídos por sus costes y el nivel de producción tiene en cuenta si los precios que ingresan con la venta de sus productos o servicios cubren los gastos de la empresa.
Los gastos de una empresa se pueden dividir entre gastos variables, gastos fijos y gastos marginales y también se debe tener en cuenta los gastos directos y los gastos indirectos. Finalmente, existen gastos en efectivo y los gastos que impactan el beneficio pero no implican un desembolso por parte de la empresa.
No siempre está claro si un gasto es variable o fijo, directo o indirecto.
Gastos variables, gastos fijos y gastos marginales
Los gastos variables, son los que cambian con la actividad de la empresa, es decir, si los negocios suben los gastos variables suben y, si los negocios bajan, los gastos variables bajan. Esta relación sigue válida, aunque los movimientos no siempre son directos, ya que hay gastos variables que exigen saltos que no necesariamente se ven en los ingresos. Por ejemplo, cuando tienes que comprar una materia prima para fabricar un producto, muchas veces debes comprar cantidades mínimas o en volúmenes determinados. Esto implica que, mientras los ingresos pueden subir con las ventas de forma progresiva, puede que los gastos suban de forma escalonada.
Gastos variables incluyen las materias primas, gastos laborales directos (aunque si son trabajadores fijos, se puede cuestionar su variabilidad), y otros gastos que se utilizan para la producción de los productos y servicios de la empresa. Otros gastos variables pueden ser, por ejemplo, materias primas directas, materiales e insumos directos, impuestos específicos, y los envases y embalajes utilizados para el producto.
Los gastos fijos son los que existen en la empresa, incluso si no se hiciera negocios. Estos pueden incluir los gastos de alquiler de edificios y los gastos de administración y, en principio, estos gastos no suben ni bajan directamente con la actividad del negocio. Por ejemplo, una tienda debe pagar sus gastos de alquiler y de electricidad, incluso si no vende nada. También se pueden incluir como fijos los gastos de seguros, servicios públicos, impuestos, y gastos administrativos.
Los gastos marginales son esos gastos que suben con la producción de una unidad más del producto de la empresa. Es decir, incluiría los gastos de la materia prima utilizada para esa unidad adicional, la electricidad y otros suministros utilizados. No incluiría esos gastos que se gastarían igual con o sin la producción de esta unidad de producto.
Gastos directos e indirectos
Los gastos directos son los que se incurren directamente con la elaboración de los productos o servicios. Estos incluyen la materia prima y la fuerza laboral directamente utilizada para la producción del producto o servicio.
Los gastos indirectos son gastos necesarios para la producción del producto o servicio pero que no se incurren directamente con esta producción. Un ejemplo de un gasto indirecto es el coste de la comercialización de los productos y servicios que se están vendiendo y algunos gastos de administración atribuibles a la producción y venta.