Los 7 hábitos de una persona altamente efectiva
¿Te preocupa no alcanzar los objetivos que te propones? ¿Te preguntas sobre las herramientas que necesitas para hacerlo? Para empezar, tienes que adquirir ciertos hábitos que te irán acercando a tu meta. Pero antes deberás comprender qué son los hábitos y para qué sirven, pues resultan de alta importancia para ser una persona altamente efectiva.
De acuerdo con el libro Apunta Alto (Nirvana Libros, 2014), del autor Ricardo Eiriz, cada persona mantiene patrones de comportamiento que conforman su carácter y personalidad.
“Los hábitos son patrones de comportamiento repetitivos, generados por nuestro subconsciente, basándose en las creencias adquiridas” señala el autor.
Según el libro de Apunta Alto, los siete hábitos de la gente altamente efectiva constituyen la estructura de un proceso de desarrollo y crecimiento personal e interpersonal, diseñado por Stephen R. Covey, para alcanzar la eficiencia en todos los ámbitos de la vida cotidiana. Según sus propias palabras, se trata de “sentido común organizado”.
Diferencias entre eficaz, eficiente y efectivo
Asimismo, en el libro mencionan la diferencia entre ser eficaz, eficiente y efectivo, puesto que al ser similares podrían confundirse con facilidad. Apunta Alto explica lo siguiente:
- Es eficaz quien alcanza sus objetivos.
- Es eficiente quien alcanza sus objetivos con el menor número de recursos.
- Es efectivo quien alcanza sus objetivos con el menor número de recursos, al tiempo que mantiene su capacidad para seguir alcanzando sus objetivos en el futuro.
De acuerdo con este libro, para conseguir una efectividad duradera se necesitan tener hábitos que se basen en los principios o valores esenciales. Es decir, que hay leyes universales que rigen todas las cosas, por ende, te dejan sustentar sólidamente prácticas constantes. Algunos de los principios que sustentan los siete hábitos son: integridad, fidelidad, valor, compasión, responsabilidad, contribución, bondad, humildad o justicia.
1. Ser proactivo
Se trata de tomar conciencia de quién eres, de ser el programador de tu propia vida. De acuerdo con el libro, el concepto principal de este hábito radica en la interiorización de que la vida es producto de nuestros valores y decisiones, y no de los condicionantes que nos encontramos por el camino. Lo anterior es porque todos contamos con la capacidad de decidir nuestras respuestas ante cualquier estímulo. Es ahí donde nace nuestro poder, y donde se genera nuestro crecimiento y felicidad.
2. Tener en mente el objetivo
Todo lo que creamos debe ser antes visualizado en nuestra mente. Este hábito parte del concepto de visión, propósito, significado, misión, entre otros, que le da sentido a la vida y a todo lo que hacemos. Es el liderazgo personal. Y finalmente, es lo que consiste en definir lo que queremos lograr.
3. Priorizar lo importante
Ya definido el objetivo, se deberá tener el conocimiento y la disciplina para priorizar lo importante, en lugar de dejarse llevar únicamente por lo urgente o las prioridades de los demás. Se trata de gestionar tu tiempo de forma correcta para lograr tus metas.
4. Siempre pensar en ganar-ganar
Este es el hábito del beneficio mutuo, y se basa en el principio de la abundancia, en contraposición a la escasez. La victoria de una persona no necesariamente debe ser a expensas de la derrota de otra. Siempre será bueno buscar acuerdos en los que ambos individuos ganen y estén satisfechos…