El mejor momento para empezar a usarlas

Hay cuatro tecnologías de vanguardia que, igual que otras tecnologías recientes, al principio estuvieron escasamente disponibles y con un alto costo. Sin embargo, hoy son abundantes y baratas. Estas cuatro tecnologías se pueden combinar entre sí de varias maneras y ya estamos empezando a ver, sobre todo en los Estados Unidos, empresas que le están sacando provecho a estas posibilidades. Sin importar a que negocio nos dediquemos, estas tecnologías, las cuatro, impactarán nuestros negocios de forma muy significativa y lo importante será en qué momento nos decidiremos a usarlas, antes de que nuestros competidores lo hagan.

Las tecnologías a las que me refiero son: microprocesadores, sensores, conectividad inalámbrica y bases de datos. Zipcar es la empresa más grande del mundo en suministrar servicios de automóviles compartidos para viajes cortos en una ciudad –una alternativa en lugar de rentar o comprar un auto- y su operación es un ejemplo de cómo se pueden usar las cuatro herramientas juntas.

Los clientes de Zipcar reservan un vehículo por teléfono celular o a través de Internet, luego van a los sitios en donde se encuentran los automóviles, pasan su tarjeta Zipcar frente a un sensor colocado en el parabrisas del automóvil (la tarjeta y el sensor se comunican de forma inalámbrica), el sensor envía una señal también inalámbrica a la base de datos de Zipcar para verificar que el usuario es el correcto y puede tomar el auto; si todo está correcto, las puertas son desbloqueadas electrónicamente y el cliente se lleva su auto.

Durante su uso, el automóvil está siendo rastreado vía satélite y si ocurre un accidente o el auto se queda varado, el sistema sabe en donde se localiza para brindarle ayuda. Una vez usado el auto, éste se entrega en el lugar correspondiente, se actualiza la cuenta del cliente y el kilometraje del automóvil y finalmente, se bloquea de manera electrónica.

Las cuatro tecnologías antes mencionadas funcionan de la siguiente manera: los microprocesadores (chips de computadora) son actualmente muy baratos y se pueden instalar casi en cualquier parte con un costo despreciable. Estos microprocesadores mejoran considerablemente la funcionalidad de cualquier cosa, desde aparatos domésticos hasta tableros de los automóviles. Combinados con un buen ancho de banda, ni siquiera se tienen que instalar físicamente en el aparato o tablero para que funcionen bien y pueden enviar señales directo a la nube en Internet.

Los sensores han evolucionado en los años recientes en cantidad, variedad, exactitud y costo y también en la facilidad para integrarlos a los aparatos o dispositivos y hoy cuentan con la capacidad de medir varios atributos.

El movimiento y la orientación lo pueden medir los sensores, tal es el caso de un sistema para juegos de Microsoft que usa sensores muy potentes para observar e interpretar los movimientos del cuerpo del usuario sin necesidad de un dispositivo físico en la persona. En cuanto a localización, la cual típicamente se logra con un localizador llamado GPS (Sistema de Posicionamiento Global), se puede lograr también con sensores, aunque con menor exactitud, mediante triangulación celular.

En cuanto a imagen, los sensores digitales para fotografía o video se usan para que los dispositivos se vuelvan ubicuos pudiendo estar presentes en varios lugares a la vez. También se usan en cámaras web, lectores de huellas digitales o escáneres de retina. Los llamados smartphones –o teléfonos inteligentes- son también un muy buen ejemplo de las aplicaciones de los sensores en imágenes.

La conectividad inalámbrica la conocemos todos los que usamos un teléfono celular o los que nos conectamos a Internet sin necesidad de cables y hay una gran variedad de tecnologías de conectividad inalámbrica que permiten conexiones de corto, medio y largo alcance en lo que se refiere a distancia. El bajo costo de la conectividad inalámbrica está impulsando las comunicaciones de máquina a máquina en la que los dispositivos “hablan” entre sí sin intervención humana.

En cuanto a las bases de datos, la menos visible de las cuatro tecnologías, son las que le dan significado a lo que sucede cuando se usan las otras tres. Ha habido una verdadera revolución en cuanto a cómo pueden ser almacenados los datos en estas bases para su uso posterior para facilitar los negocios. Hoy las bases de datos son más accesibles y fáciles de usar para las personas que las interpretan.

Las posibilidades de uso de estas cuatro tecnologías combinadas son infinitas y tienen y tendrán aún más, un alto impacto en la forma de hacer negocios. Hoy es el mejor momento de empezar a usarlas.