Los ricos siguen encargando coches a Ferrari
E l coronavirus no ha hecho tambalear los cimientos de Ferrari, uno de los máximos exponentes de la exclusividad y el lujo. La fabricación y entrega de los coches se redujo en el segundo trimestre del año, en pleno auge de la pandemia, periodo en el que se despacharon 1.389 vehículos, un 48% menos respecto al mismo periodo del año anterior, en el que se entregaron 2.671 coches, debido a la suspensión de la producción de vehículos en las fábricas de Maranello, donde está la sede central desde su fundación en 1947, y en Módena, así como al cierre de los distribuidores en la mayoría de los puntos de venta del planeta.
Los ingresos netos de abril a junio fueron de 571 millones de euros, un 42% menos que los 984 millones obtenidos en el mismo trimestre de 2019, con una caída del Ebitda del 60%, pasando de los 314 millones de euros a los 124, según los resultados presentados esta semana por la compañía, en los que detalla que, por ejemplo, las primeras entregas de la nueva generación de deportivos de la casa, el F8 Spider y el 812 GTS, se realizaron en el primer trimestre del año, mientras que de la familia del emblemático 488 Pista se han realizado los últimos pedidos, ya que este modelo se acerca al final de su ciclo de vida.
Por regiones, las ventas en EMEA (Europa, Oriente Próximo y África) cayeron un 40,9%, en América disminuyeron un 52,6%, mientras que en China continental, Hong Kong y Taiwán el porcentaje descendió hasta el 91%, como consecuencia, según señala la empresa, de la anticipación de las entregas de coches en 2019, además de los efectos del Covid- 19, mientras que en Asía Pacífico la caída fue del 27,9%. A pesar de este tropezón en los ingresos, el mercado está premiando los mensajes positivos que la marca acaba de lanzar…