No hay discriminación de salario por género, el problema es otro
Es innegable, todas las estadísticas lo muestran, que existe una notable brecha salarial entre hombres y mujeres. En España, por ejemplo, se estima que las mujeres cobran un 20% menos que los hombres, incluso con mayor nivel de formación.
Esta demoledora estadística lleva a muchos a pensar que hay una discriminación de salario por género, pero no es así (o al menos no más allá de casos aislados). Lo cierto es que si fuera así la solución sería bien fácil, ya que identificar a los que se saltan la ley (esto iría en contra del artículo 14 de la Constitución) y multarles sería suficiente para solucionar el problema, pero la realidad (siempre tozuda) es más compleja.
Causas de la brecha salarial
El problema de la brecha salarial es mucho más compleja. Un buen ejemplo de las causas la encontramos en el exhaustivo informe del Korn Ferry Hay Group, con datos a lo largo de todo el mundo y que además agrupa información de otros estudios.
El principal problema para este gap salarial es que las mujeres no acceden a los puestos mejor pagados, ni a las mejores funciones ni en los mejores sectores. Y en cambio los hombres sí acceden a estos puestos.
Por poner un ejemplo de los puestos y funciones mejores pagadas, de las empresas que pertenecen a la lista Fortune 500, las mujeres ocupan solo el 16,9% de los sitios del Consejo y el 14,6% de los puestos ejecutivos (datos de 2013)…