Crónica de una muerte anunciada, de una Pyme
Todo empezó alrededor de Abril/Mayo del 2009 cuando una de las empresas más grandes de España, una multinacional, llamó a la puerta ofreciendo comprar una cantidad importante de los productos de la empresa.
Si esa operación saliera adelante, sería la venta más gorda del año, casi de la historia de la empresa, una Pyme con muchos años en su negocio pero una Pyme de las miles y miles que hay en España, cinco trabajadores y todos, menos uno, familiares. Además, en tiempos de crisis, cualquier venta es buena y, si se pudiera abrir la puerta de un cliente muy grande pues hay que intentarlo.
Después de semanas de negociaciones y de exigencias por parte del comprador, incluyendo una reducción importante de los precios, se llega a un acuerdo en precio y en condiciones de pago a 90 días que, para una Pyme que tiene que pagar los productos inmediatamente, es mucho tiempo esperar.
No obstante, deciden ir adelante y, poco después, reciben el contrato que, aunque no cambió el precio acordado, exigían unas condiciones de pago de seis meses, sin pagos iniciales ni nada. Tu les das tu producto inmediatamente y ellos no sueltan nada de nada durante 180 días.
Es que hay que entender y aceptar que las empresas grandes tienen sus procedimientos y condiciones y no pueden cambiarlos para acomodar a los pequeñitos, incluso para cumplir con acuerdos que ellos mismos habían aceptado. Así lo presentan.
Bueno vale, adelante, esperaremos recibir todo en un pago después de los 180 días, es decir, el 26 de diciembre de 2009. Como el cliente es grande, seguro que se podrá descontar la factura con el banco aunque el coste reducirá aún más el margen. Se acuerda con el banco los gastos y, por precaución, se extiende el descuento hasta primeros de eneroâ¦.nunca se sabe.
Los productos se envían sin problema y el cliente está encantado…