El capital riesgo busca más de 4.000 millones para invertir en España
Un dinero a coste cero que parece no tener fin, una renta fija con la rentabilidad en el subsuelo y una Bolsa en pleno declive. Este es el cóctel perfecto para que el capital riesgo prolongue la etapa dorada que ha vivido en España tras la crisis y llame a la puerta de grandes inversores de todo el mundo para pedir dinero que invertir después en empresas y proyectos en España. En concreto, el sector espera captar más de 4.000 millones en los próximos meses, antes de que los efectos de la ralentización económica se dejen sentir en el mercado.
Son más de una docena de gestoras españolas las que o bien se encuentran actualmente o bien prevén hacerlo entre finales de este año e inicios del próximo en fase de fundraising, tal y como se conoce en la jerga al periodo en el que acuden a family offices, fondos de fondos, fondos de pensiones y aseguradoras de todo el mundo para conseguir el capital necesario con el que se harán con empresas patrias. Los fondos llegan fundamentamente de fuera de las fornteras españolas, dado que la inversión patria en capital riesgo es aún una anécdota.
Cada una de estas gestoras sigue una estrategia, cuenta con un calendario concreto y se enfoca en un nicho de mercado distinto. La boutique de inversión Altamar –que habitualmente trabaja con fondo de fondos; es decir, invierte en otros vehículos que son los que compran o venden compañías— está recabando fondos para tres vehículos. Acaba de registrar un fondo secundario, que toma participadas que otros fondos quieren retener pero a las que vence el periodo de inversión, dotado con 750 millones. También está captando capital para su segundo fondo de infraestructuras, de 400 millones, y está rematando el fundraising para su último vehículo generalista, de 750 millones.
También su principal competidor en España, Arcano, ha puesto recientemente el foco en expandirse en el mercado de infraestructuras. Antes de verano realizó el primer cierre del Arcano Earth Fund. Y en primavera el de su duodécimo fondo de fondos.
Entre las gestoras españolas de referencia en la compraventa de empresas –las llamadas corporate buyout– MCH y Magnum están llevando a cabo las labores de fundraising de forma paralela en estas semanas. La primera espera alcanzar los 400 millones antes de fin de año, mientras que la pilotada por Ángel Corcóstegui ha puesto el listón un poco más alto, en los 500 millones, para constituir uno de los mayores vehículos nacidos tras la crisis.
Este honor actualmente recae en Portobello, con su cuarto fondo de capital riesgo, con el que cuenta aún con capital para invertir. Ahora ha decidido volver al mercado con un fondo de minorías, por 350 millones, para dotar de más flexibilidad a su estrategia inversora. También Miura ha decidido probar suerte con un fondo más epecífico, en este caso en el sector agro.
De menor tamaño son las propuestas de Diana Capital, Axon y Qualitas, cuyos fondos son en todos los casos de un tamaño inferior a los 200 millones. Estos dos últimos ya han recabado sus primeros 100 millones cada uno. Oquendo Capital –especializado en deuda– espera captar 250 millones.
Entre los debuts en el sector se enucentran el de Queka Real Partners, la aevntura del exsocio de Corpfin, Patrick Gandarias, junto al fundador de Auriga, Enrique Martinavarro, que obtuvo el visto bueno de la CNMV ya en 2018. También el vehículo de Jesús Olmos, exejecuivo estrella de KKR, Asterion, enfocado en la inversión en infraestructuras. Ambos vehículos han captado ya gran parte de su capital y han ejecutado sus primeros cierres. Así como el nuevo fondo de 175 millones GED, la gestora de Enrique Centelles, que ya ha realizado el primer cierre.
Otros actores del mercado nacional ya calientan motores. Y esperan al arranque del año que viene para lanzar sus nuevos vehículos. Este es el caso de Abac, que sondea lanzar un fondo de 350 millones, frente a los 320 millones del primer vehículo con el que se estrenó la antigua cúpula de Apax en España (Oriol Pinya, Borja Martínez de la Rosa y Javier Rigau). Ahora contarán también con la ayuda de su nuevo fichaje, Federico Conchillo, ex de Pai Partners. El año que viene también será el turno de Sherpa, aunque aún no han determinado el tamaño de su futuro vehículo.